lunes, 5 de enero de 2009

El sencillo mundo de Laura

Laura es una de mis compañeras de trabajo. Llevo dos años viéndola durante casi diez horas cada día, excepto sábados, domingos, festivos y vacaciones. La veo más que a mi familia. Sin embargo, si reflexiono sobre ella, caigo en la cuenta de que nada sé acerca de su persona y de sus inquietudes en la vida.
A Laura no le gusta meterse en problemas. Hace todo lo que de ella se espera: llega siempre cinco minutos antes de la hora de inicio de la jornada, realiza sus tareas rápida y mecánicamente, en silencio, come algo y vuelve al trabajo. Suele trabajar cada día conectada a su IPOD. Y así día tras día. Ni una palabra, ni una broma, ni una risa, ni un comentario, ni una opinión. Jamás la he visto cambiar impresiones durante la jornada con otros compañeros, salvo cuando está en su tiempo de descanso. Nada. Nuestro jefe está contento con ella, aunque dudo que hayan mediado más de tres palabras en los seis o siete años que lleva trabajando en la empresa.
Laura parece una buena chica, sencilla, tranquila y nada conflictiva. En mi trabajo las ¿cabezas pensantes? desean que todos seamos como ella.
Sin embargo, si yo fuese jefe, no me gustaría tener a Laura trabajando conmigo... No querría gente aislada, que no supiese trabajar en equipo, carente de opinión, sin alegría durante la jornada, que no se relacionase con los demás compañeros y que no expresase sus ideas y opiniones acerca del trabajo y de lo que podría ser mejor para la empresa.
Desgraciadamente, mis superiores han conseguido que el 95% de su plantilla sea como Laura...
Definitivamente, estoy a años luz de entender las políticas del curioso lugar donde trabajo. Por si me quedaba alguna duda: ¡ese sitio no está hecho para mí!

4 comentarios:

mariposa dijo...

Hola, creo que estamos viviendo un momento en el cual se pide cada vez más al empleado y se da cada vez menos, los empresarios quieren empleados como LAura, y a mi también me parece de locos, porque personas que no se relacionen con otros no hacen que las empresas vayan mejor, porque están carentes de ideas, y una empresa que no innova, no tiene un futuro prometedor o eso creo.un saludo

Anónimo dijo...

No ha sido tu último post, sino el penúltimo. Saludos.

Anónimo dijo...

Veo que no ha salido publicado mi primer comentario, con lo cual no vas a entender el que figura publicado. Te decía que tu penúltimo post me inspiró mi post de hoy.
En cuanto a Laura, yo no me atrevería a calificar su mundo de "sencillo", pues he conocido a personas en mi ambiente de trabajo que inicialmente presentaban idénticos síntomas que el de Laura y luego, una vez profundicé en el conocimiento, vivian mundos bastante complejos e interesantes. Saludos.

Anónimo dijo...

Gracias por vuestros comentarios.
Mariposa: realmente es un momento difícil para el empleado, al menos así lo estoy percibiendo yo.
Guillermo: Seguramente no será un mundo sencillo. Igual no quedó del todo claro en el post.Quería decir que el "sencillo mundo" es provocado por nuestros superiores... No tenemos la posibilidad de relacionarnos. Algunos nos "arriesgamos" a hacerlo y otros, como Laura, no hacen nada y dejan la vida pasar... a eso me refería.